Reflexiones acerca de Debian Squeeze

Hace poco instalé en mi equipo la última versión estable de Debian (6.0.1a) de nombre clave Squeeze, que me ha sorprendido gratamente y aunque le tengo mucho aprecio a Ubuntu, con Debian me siento demasiado comodo, la fluidez de esta distribución en mi equipo (Pentium 4 a 3.00GHz, 1Gb de Ram) ha sido tal que no pienso volver a Ubuntu, incluso cuando un hace poco tuvo lugar nuevo lanzamiento que promete mucho. Generalmente recomiendo Ubuntu y Linux Mint, pero de ahora en adelante me inclino por esta grandiosa distribución.

Debian

Debian es una de las distribuciones GNU/Linux más antiguas junto a Slackware y Redhat,  mientras que de slackware y redhat se han derivado distribuciones tan populares como Suse Linux (actualmente OpenSuse), Fedora, CentOS y Mandriva, Debian es la base de distribuciones como Knoppix, Linux Mint Debian Edition LMDE y la muy conocida Ubuntu. Debian tiene como objetivo ofrecer un sistema operativo estable con una gran cantidad de paquetes (aproximadamente 29000 en este momento), libre para usarse y redistribuirse tanto para usuarios de escritorio, como para servidores.

Debian es «el padre de Ubuntu» y  cuenta con el sistema de paquetes .deb, y usa igualmente a apt/aptitude para la admistración de paquetes. La mayoría de paquetes que están disponibles para Ubuntu están igualmente disponibles para Debian, la diferencia es que los paquetes que se encuentrán en los repositorios oficiales de Debian (Estable) no son los más recientes ya que deben ser testeados en profundidad para asegurar una máxima estabilidad del sistema. El ciclo de desarrollo de Debian es mucho más largo que el de muchas distibuciones y esto se ve reflejado en una gran estabilidad del sistema. La versión actual de Debian es la 6.0.1 (primera actualización) fue lanzanda el  19 de marzo del presente año y su característica más destacada es la inclusión de un kernel totalemente libre, aparte de la actualización de un gran número de paquetes presentes en la versión anterior de Debian (Lenny).

Sin la más mínima intención de desmeritar a Ubuntu, les cuento que con un par de pasos no muy complicados se puede convertir el Debian Squeeze básico a una distribución bastante funcional, moderna y elegante, por lo menos así se ve mi escritorio en este momento:

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